No ha sido fácil, si algo nos ha enseñado este año, es que » todo puede cambiar, en cualquier momento y repentinamente» sin detenerse el mundo una vez nos demuestra lo efímero que es el tiempo.
Ante esto no podemos quedarnos estáticos, como estado, debemos buscar soluciones y responder ante los retos que se nos pongan enfrente, esto nos hace despertar para darnos cuenta que como partido debemos seguir innovándonos y trazar los rumbos de nuestro partido porque «El mundo cambió ¿y Tlaxcala?, ¿ Tlaxcala cuándo? «, el presente es el camino y el futuro está por venir.